Creo que ya puesto alguna vez ese mismo título en alguna que otra entrada y una vez más, vuelve a pasar.
Llevo, casi, un mes sin comunicación con la persona que fue mi última ilusión, y pongo casi, porque el famoso día del apagón se me ocurrió poner en el estado la pulsera que ella me regaló, sé que ella lo vio, pero no dijo absolutamente nada, es probable que no entendiera que, ese día histórico y especial, yo, me acordara de ella y por supuesto, nada al revés, o al menos, no noté nada en ella que la hiciera acordarse de mi.
Y sinceramente, este mes ha sido el que más luz me ha aportado a "lo nuestro" o sea "la nada más absoluta", ya que, ahora mismo puedo decir que "no espero nada de ella" porque, probablemente, ella no sepa ni que escribir ni qué decir ni nada por el estilo.
Porque, ¿qué se dice a un amigo del que no sabes nada desde hace más de un mes y que un día le dijiste "tenemos que tomar un café"? ¿Es posible que ese más de un mes no te hayas acordado de esa persona y si es así, claro, para qué escribir? Y como digo no sabrás que decir.
Si esto me pasa en verano, lo de no escribir nada, me parecería normal, ahora, la "anormalidad" es "lo normal", cuando si, antes era a diario, mientras no estaba con su contrario, ahora, todo es diferente.
Y sinceramente, si todo va bien, quizás, hasta bastante más adelante y hablo ya de octubre, no creo que tengamos algún contacto, al menos, por mi parte, cualquier otra cosa, por su parte, sin "algo en sus palabras" es impensable, y como la he dicho alguna vez a ella, "me tengo que acostumbrar y es lo que hay y habrá"...
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