Tengo que decir que esta última semana ha sido una de las más raras que he podido pasar en vacaciones por situaciones que yo no podía controlar y por lo tanto, me dejaba llevar y lo hacía.
Para empezar he asistido al funeral de la madre de mi compi de facultad: no nos vemos mucho, no hablamos mucho, pero cuando lo hacemos, de la hora, no suele bajar. Ese mismo día yo pensaba que estarían con él su pareja y su hija, y le dejé hablando con más gente: cuando me llamó al día siguiente, que fue cuando hablamos más de una hora, fue cuando supe que había venido solo y estaba solo con su hermana. Primera cosa curiosa.
La segunda ha sido saber por las mañanas cada vez menos cosas de mi "nueva ilusión": ha sido un parámetro bastante curioso: de repente, por las mañanas, cada uno hacíamos nuestras cosas, bueno, yo lo normal y si me preguntaba se lo contaba, ella, no lo sé, nunca me lo decía, pero, como digo, muy poco para lo que otras veces hemos hablado. Y las tarde, como sé que a las cinco llega la hora de la despedida, a veces ella se dormia un rato y yo, calladito, sin decir nada, esperando casi hasta la mañana siguiente para contar lo mismo, o casi lo mismo: las tardes, me las quedo para mi.
Y si que hubo un día de inflexión: tenia alguna esperanza de tomar algo con ella el día que iba a firmar mis papeles, pero resulta que en su cabeza tenia otro plan y al final no cuadro nada, bueno, no cuadro nada conmigo, pero si con su amiga (ahora contaré una cosa que no sé si ella sabe) así como ir al pueblo o quedar con otra compañera de trabajo, entonces ¿en qué lugar quedo yo?
Cuento lo de su amiga: era la primera vez en todo el verano que me decía su nombre: me dijo que habían quedado para darla su regalo que ya sabía, y dar una vuelta: se me ocurrió mirar en cierta página web que era de su vida, de carreras o relatos, si, escribe cosas, y curiosamente, al día siguiente iba a tener un encuentro de micro abierto para contar sus cuentos a niños, es decir, no queda con nadie, no queda con gente, pero si va a esas actividades ¿casualidad?
Y llega el fin de semana: ella se irá a su pueblo, me preguntará que haré, como siempre y no si quisiera hacerla daño se lo diría, me voy a tal ciudad, pero paso, prefiero hacer lo que quiera hacer, cuando quiera hacerlo y sin dar las menores explicaciones, como ella ha hecho durante esta última semana.
Y para finalizar hablo del cartero, en su última semana laboral prevacaciones, si es que empieza el lunes, porque, no, tampoco cuenta nada: si que hemos coincidido un día en el bar, casi de casualidad, pero, también, sin decir nada, él se tenia que ir: al día siguiente, lo intenté otra vez, pero, como otra vez, sigue sin decir nada, pues así, es imposible, sino avisa y no le da la gana hacerlo, será también por algo.
Y así finaliza mi última semana de vacaciones, solo queda un día, espero que sea lo más normal posible..
No hay comentarios:
Publicar un comentario