El otro día avisé a mi amigo de las carreras, al menos con el que iba antes e íbamos juntos al mismo ritmo, que, por muchas casualidades podría correr este año también la media maraton de la ciudad.
Lo primero que me dijo que "como todos los días hacia deporte" pues lo haría bien. Él está pasando por una etapa poco deportiva, por su trabajo y por sus seres menores, y que no le da tiempo para más.
Si la frase hubiera terminado en ese momento, me hubiera parecido bien, pero, no pudo contenerse para arremeter contra una influencer que desde hace tiempo empezó a correr mucho e incluso a ganar carreras y tiene muchos hijos: su explicación, lo que a él le vale, fue que "tiene que tener ayuda de personas y por lo tanto no se creer que cuide a sus hijos y haga tanto deporte".
Como eso yo no lo sé, y tampoco quería discutir, no dije nada, pero es probable que si, que esa persona tenga ayuda para cuidar a sus hijos, pero, lo que es poco reprochable que corre mucho y muy rápido, y eso es lo que yo intuyo que más le fastidia, igual le pasó conmigo, que, cuando empecé a ganarlo, fue cuando se empezó a enfadar, primero con él, y luego en parte conmigo, y ahora con esa persona también..y es que, en lugar de disfrutar de lo que tiene, se cabrea con lo que no puede...cosas de la vida...
No hay comentarios:
Publicar un comentario