El otro día quedé con un compañero de cursos y de profesión ya que, desde hace tiempo intentábamos quedar y tomara algo.
Lo primero es que, después de quedar, el amigo exzamorano me informaba de su presencia por la ciudad, para hacer algo, pero, en este caso, yo ya tenia otros planes, y se los comenté, yo creo que se sorprendió bastante, pero ni dí ni daré más explicaciones, como cuando queda él con "sus amigos de facultad o instituto" que casi siempre es para hablar de trabajo.
Con el chico que quedé hablamos de todo y de todos: pero, como me hace otra persona, siempre suele dejar lo "más interesante para el final" pero, es algo, que ya me había contado alguna vez.
Él tiene interés por una persona que estudia fuera de nuestra ciudad y como es normal, cuando le ha pedido algo, él lo ha hecho, por tener una excusa para verse con esa persona, pero, pasado un tiempo prudencias y él le ha pedido, algo más que tomar algo, la respuesta ha sido...el silencio, cosa que ni a él ni a nadie gusta, y que, desde mi experiencia persona, yo creo que el silencio es un no rotundo, y que, más vale no volver a insistir, pero, como está sumido en ese "enamoramiento" que todos hemos tenido alguna vez, cuando le dices las cosas como son, no como él quiera que sean, pues no gusta, sobre todo por que, como se dice antes no es mi amigo íntimo, y aunque yo le haya contado alguna cosa, ni mucho menos suelo contar a compañeros de cursos mi vida personal/intima, no sé que pensarían, pero yo si sé que pensar de mi mismo, consejos tengo que suelo cumplir, y si me piden dar, dar...sobre todo, si ya me ha pasado a mi.
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