Desde que hemos podido empezar a salir a la calle, mi amiga exsroriana, me propuso, como otras veces, intentar hacer algo de deporte.
Para poder hacer ese tipo de ejercicio, ella quería intentar correr, pero, no está ni estará preparada para ello, asi que, la propuse que yo iba corriendo y ella en bicicleta, y acepto gustosamente.
Lo segundo era el tiempo: ella tiene tiempo limitado para poder estar con su familia y casi solo daría tiempo a una vuelta y poco más, pero, eso ya no era mucho mi problema.
Así que, el segundo o tercer día que podíamos salir quedamos para ir hacer deporte de esa manera y como era previsible, solo dio tiempo a una vuelta a todo el barrio y luego ella, se fue para su casa y yo seguí haciendo mi deporte.
Al día siguiente, se puso muy negro y ella aborto su misión de poder hacer deporte: el siguiente día, ya ni llamó, para el tercero, escribirme para decirme que "ya no iba hacer deporte y que lo haría en casa" y lo segundo, también un poco esperable, "su entorno laboral, según ella, no la gusta y la agobia": ya me contó algo el día que fuimos hacer deporte, ya que, cuando algo la molesta, es incapaz de tener incontinencia verbal y se lo acaba diciendo a la persona, eso alguna vez también me ha pasado a mi, y según ella, su jefa directa, la llama en momentos no adecuados y ella, solo la cobra una parte de su suelo por tener excedencia laboral y según ella, no la está aprovechando...asi que, ha decidido apagar todas sus redes sociales laborales para centrarse en su familia cosa que me parece bien
Y como me imaginé, antes de que empezara todo esta propuesta deportiva, sabía que, antes de empezar, se podría acabar, y así ha sido: una vez más, cuando alguien va, yo ya he ido y venido...
Veremos cuál es la siguiente....
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