Pues es miércoles y es un fin de semana largo que me quedaré en la ciudad: ¿qué espero? la verdad es que nada, total tranquilidad en mi vida y estado de ánimo. En minutos, tal vez horas, la rubia se marchará a la playita portuguesa, asi que, no espero recibir ni toques ni sms desde donde este. También en horas, bueno, más bien días, nuestro amigo José iniciará una nueva vida en tierras madrileñas, donde, aún, no tiene piso, ni prisa por cogerle. Su idea de mañana es, dar una vuelta con la moto, tal vez la última, acudir a rezar y por la tarde-noche, ver el partido del pucela, y luego, su vida será la que sea, por las mañanas conocer Madrid, por la tarde, trabajar...no sé si me llamará, yo, al principio si, luego, si quiere, que sea él...la próxima semana, por que me interesa, llamaré a la rubia, que hable..jejeje
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