Hay veces en la vida que ciertas personas no deben de estar con ciertas personas y eso, te lo da el tiempo, el querer, el poder y el necesitar estar unos con otros.
Me ha pasado alguna que otra vez, y es normal, lo que hacen algunos amigos de no juntar a unos con otros, conmigo también lo hacen, y aunque no lo digan, si que lo hacen.
El caso es que, intentar unir a la amiga exsoriana con el amigo cartero, es, cuando un menos un caos: por diferentes motivos no reconocidos, o mejor dicho, si reconocidos hacia mi persona, que a no me acaban ni de gustar, ni de convencer, hasta incluso me da demasiadas explicaciones sobre el tema: el primero de ellos fue que "en teoría no quiso pagar un día una consumición", el motivo era que no tenia suficiente dinero y ella, la exsoriana, se lo tomo a mal, desde entonces, ella decide que pagar y cómo pagar: vale, perfecto, una vez lo puedo entender, pero más de una vez a mi me ha hecho lo mismo y no, no he protestado y no he dicho ni mu, simplemente, me he callado y he optado, por eso, a veces, ver hasta cuando ella me llamaba, y cuando era eso, pues cuando no tenia ni plan ni con quien estar.
Y la segunda, que más me puede fastidiar, es porque el cartero lleva con un ojo mal bastante tiempo, y le han dicho que no es contagioso, es un simple orzuelo, pues aunque está diagnosticado ella no se lo acaba de creer del todo, y prefiere que, al ser pequeño casi ni la roce ni nada por el estilo: y es que, todo somos suficientemente mayores para saber si podemos contagiar a alguien o no, y si no te fias de eso, pues apaga y vamonos.
Mi solución es fácil, cuando quede con uno no avisaré a otros y al revés, además, si se encuentran, no se tienen porqué enterar unos de otros, ni contar cosas, tampoco, unos de otros, ya lo he hecho alguna que otra vez, dificil, no será, ni es.
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