La semana pasada los amigos madrileños perro incluido me llamaron para hablar un rato conmigo.
No me dieron grandes novedades y tengo que decir que, desde que yo decidí dejar de llamar a la gente, un poco, hemos perdido ese contacto, incluso más, diré, este año no fui de vacaciones allí, un fin de semana, como he ido todos los años, por dos motivos: primero, por que no quería ir, segundo, este año, en ningún momento me dijeron que fuera...no es haya mal rollo, no, simplemente que cada persona, cada vez más, hace su vida y lo que les interesa.
El caso es que, eso me dijeron, que este fin de semana pasado, este por fin venían, pero, como siempre, no sé que plan traen y no sé con qué gente/familia suelen quedar...
Y así pasó el viernes y el sábado...y fue por la noche cuando me acordé, miré él móvil y nada de nada...pensé en escribir, pero "¿para qué?"
Asi que, el domingo, como era previsible, no hubo llamada, ni mensaje, ni nada por el estilo
No pasa nada, en otra ocasión me dirán que están por aquí, supongo
No son los primeros, hace bastante tiempo, casi más de tres meses que no veo al amigo arreglatodo, jeje, aunque ese, con dos enanos, es bastante más complicado, antes sacaba algo de tiempo.
Pero, como digo, parte de culpa tendré, pero, si es verdad, que en muchos casos, yo mismo me he cansado siempre de ser el que llama y casi nunca al revés.
Sin ese contacto, realmente, me va bastante bien y observo, quién quiere estar cerca de mi y quien no.
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