La historia del sábado comienza días antes: mi primo me comentó que teníamos que hacer bastantes kilómetros para prepararmos para el Mapoma, maraton popular de Madrid: el caso es que finalmente me llamó el viernes por la tarde- noche, mientras estaba con E. y quedamos para las 10 de la mañana del sábado y eso que el viernes estuvo casi todo el tiempo lloviendo.
Ya el sábado, antes de las 10 me volvia a llamar y minutos después estábamos corriendo por la ciudad: controlando el pulsómetro, y controlando nuestro ritmo y casi sin querer estuvimos corriendo 22km dos horas y diez minutos, yo creo que algún kilómetro más: las sensaciones fueron buenas, las piernas estaban bien y la cabeza también, ahora falta saber si somos capaces de aguantar 42 km y pico...poco a poco lo iremos consiguiendo
110. Sigo viva y adicta al choco:)
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Soy lo peor, hace semanas (¿qué digo semanas? ¡Meses! ¿Qué digo meses?
¡Años!) que no escribo aquí y ni he dicho nada. En fin, que ahora podéis
encontrarme...
Hace 10 años
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