Última quincena de vacaciones para luego volver a la rutina y veo que todo sigue igual.
Sigo siendo la misma persona que tira del carro para que hacer planes y que la gente se suma o no a esos planes y es que, siempre ser yo el motor de todas las cosas no me acaba de convencer, más que nada, por que veo la "vagancia" del resto de personas a la hora de proponer cosas.
El otro día pasó algo curioso: estaba el amigo madrileño por la ciudad y yo tenía una carrera y el cartero tuvo que decidir que hacer: en principio me iba a acompañar a la carrera, pero, como siempre, le surgieron otros planes, que luego me dijo, aunque se los podía haber callado: el amigo madrileño se fue a su casa mietnras el cartero venía hacia la suya, por que los otros amigos habían quedado bastante más tarde, pero por medio se cruzó mi amiga soriana, que él también conoce un poco, y ¿qué pasó? Pues que el cartero se metió en el coche y acabó con mis amigos en un sitio, y a visto después, me pareció algo raro y mal para mi: cuando él va con sus amigos no me dice nada, ni me invita y en este caso, él se autoinvitó y acabó alli, es decir, como siempre, yo era el segundo plato y solo cuando no tiene otra cosa que hacer, soy el primero.
Como he dicho muchas veces, ni soy ni seré segundo plato y veo, cada vez más, como son las personas, llamadas, amigos y que no lo son tanto...si no, un poco, como el cuco, que se va acoplando a tus amigos y luego son más suyos que tuyos...pero, siempre al final saldrá la verdad..y eso, cada vez se ve más...y claro, a mi no me gusta...veremos el camino de cada uno...
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