Digamos que uno se acaba acostumbrando si se monta en una canoa y va en el rio a que la corriente le lleve donde quiera y si le apetece uno, va a la orilla y si alguien se monta bien, y si no se monta, también...pero a veces en la orilla no hay nadie, y tú sigues remando hasta el siguiente tramo, que ya verás si hay gente o no.
Más o menos así van estos días, te puedes ir imaginando cosas, pero luego te sorprenden y ver que sigues remando, con o sin sentido o simplemente, te montas y te dejas llevar.
Cosas que sé de la tarde, que iré de visita, no sé hora ni hasta cuando, pero me puedo imaginar que mi amigo el cartero tal vez me proponga algo a media tarde, cuando esté yo de visita: viendo lo que me pasó el fin de semana, que él estaba haciendo muchas cosas, ¿voy a querer quedar hoy? Pues si fuera normal no, pero como soy así me queda siempre el tal vez, el puede que si...el ya iremos viendo....pero a estas horas, aún ,no lo sé, ni tan siquiera sé si él me dirá algo..asi que, yo de momento voy con mi canoa a lo mio..y veré si me acerco a la orilla o sigo remando, jejejeje.
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