Esa frase la suelo utilizar cuando mis amigos hablan de cosas y yo no sé sobre el tema, que es la mayoría de las veces, o al menos muchas veces y esto me empieza a pasar ya en el trabajo, cosa, que no debería ser normal.
La primera hora fue más o menos normal, excepto por que una compañera me estaba pidiendo un cambio de hora, donde yo, en ese caso, ni pincho ni corto, pero que, como la viene bien, lo cambiará.
La segunda hora ya fue rara: nadie me avisó de nada, pero, en mitad del trabajo, otra vez, no tenia por que se iban no sé donde, y digo yo "tanta reunión para luego no enterarme de esto" y así fue, se fueron y yo me quedé tan tranquilo, ni bajé donde debería ir hasta media hora después y luego todo normal...hasta el momento del descanso que me dieron un papel donde me informaban de lo que sucedería el próximo viernes, un cambio más, que me vuelve a medio influir, al menos las primeras horas, eso si, me han avisado dos días antes, luego, lo que tú programes, hagas o dejes de hacer, parece que les da igual...creo que me voy a resarcir en el final de trimestre, tiempo al tiempo.
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