Como es sabido el otro día estuve en una de las carreras que, dicen los expertos, al menos hay que hacer una vez en la vida, y yo creo que así es.
El caso es que, como hice en los maratones envié un mensaje a la exrubia, que lo sabía por que yo lo había puesto en otra red social, pero, supongo que no se imaginaba que yo fuera a enviarla ese mensaje, aunque sí me dio las gracias, y nada más.
Sinceramente, pensé que luego a lo largo de la semana me preguntaría que tal, como me fue y todas esas cosas, pero, esa conversación/mensaje, nunca llegó y no, no me lo esperaba.
Es probable que dentro de unos días un familiar vuelva a pasar por el quirófano y sí, me gustaría decírselo, pero visto las pocas ganas que tiene de preocuparse de mi y mis circunstancias, pues fácil solución, creo yo.
Veremos si me equivoco, o como otra veces, acierto.
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