La verdad que cuando me pasa opto por hacer casi siempre lo mismo, y no sé si es lo más adecuado: digamos que sería como huir, pero sin ir a ningún lado, y a la vez no ir.
Me explico: con ciertas personas que se dedican a esto de la hostelería mantengo una "confianza" más que cualquier otro cliente, a la hora de pedir, hablar y pasar un buen rato tomando café, unas veces bueno y otras no tanto.
El caso es que una de esas personas, tengo su teléfono y de vez en cuando, sobre todo, cuando voy por ese lugar, después la suelo mandar mensajes, también, cuando sé que se ha ido fuera, por ejemplo a trabajar a Madrid.
Y es que, el otro día, yo sabía que se presentaba a un examen bastante complicado además de terminar su máster y yo, algo ilusionado por que me pudiera contestar fuera del ámbito estrictamente laboral...pues no lo hizo ni a la primera ni a la segunda...asi que, hoy lo he tenido bastante claro cuando, yo mismo he decidido no pasar por ese lugar, y es que, como digo, me siento bastante defraudado con esa persona, como sé como soy, esto me durará un tiempo determinado, pero no sé cuánto y cuando vuelva, puedo imaginar que todo será como antes....si es que vuelvo....
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