Puede que el segundo sea más duro que el primero, pero, ser fuerte no es una opción, es mi opción.
Y todo esto viene porque, por segundo día consecutivo, "mi nueva ilusión" no ha enviado ningún mensaje en su horario habitual, y fuera tampoco.
Quiero pensar que ha estado muy liada con sus cosas, tampoco ha puesto fotos en su estado de nada, pero, las casualidades de la vida, han hecho que, en la ciudad, en mi no típica carrera de los jueves, nos hemos cruzado, bueno, más bien, ella me ha visto:iba en su coche, creo que con su madre al lado, y me ha pitado, varias veces, con la mascarilla puesta y me ha dicho "hola con la mano", y yo, he saludado también y fin de nuestro encuentro en cinco segundos, escasos.
Y no sé si mañana llegará el mensaje de ayer te vi, que tal estos días o si, realmente, este es el principio del fin, de esa libertad que siempre me ha hablado, tipo "tienes que ser libre, y por eso ya no te escribo" y todo ese tipo de cosas que me decía y ahora, son realidad.
O quizás no escriba y no diga nada, no lo sé, no sé lo que piensa, no sé lo que quiere.
Eso si, a mi me ha tocado hoy ser fuerte: me he ido poniendo frases para no escribirla a ella: si hace dos días ya notaba que la costaba escribir, ahora, que no lo hace, no tengo que pedir explicaciones ni decir absolutamente nada. Esto tenia que llegar, como me llegó con otras personas y lo supe afrontar, con tiempo, eso si, pero lo supe afrontar.
Y casi siempre hago lo mismo, mantener ocupada la cabeza haciendo otras cosas, quedando con otra gente y, cuando estoy solo en casa, es cuando me acuerdo si ella habrá estado haciendo algo o no..miro el móvil, y solo pienso, "algún día tenia que pasar y tengo que llevarlo lo mejor posible y si, espero que nadie se entere de nada nunca, como hasta ahora".
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