El pasado lunes tomé, creo, el último café con la chica que fue mi última ilusión y si, creo que será nuestro último café.
La excusa fue su cumpleaños, de más o menos un mes y, hasta ahora, no había tenido para mi, cuando, hemos pasado unas vacaciones, varios fines de semana y ella poniendo fotos sonriendo con bastante gente, pero, como digo, quedar conmigo, casi, era misión imposible.
A todo esto, me lo dijo el viernes, casi con cuarenta y ocho horas antes, y yo ya suponiendo que su fin de semana, estaría ocupado, pero, en un primer momento la comenté que tenía el coche en el taller y que no sabía como me cuadaría.
Por la mañana empezamos una conversación, en principio normal, pero, desde el inicio se la notaba triste, no sabía el motivo, pero era sobre su ser menor. También, en esa conversación me decía lo de siempre, que yo sería un buen amigo y nada más, y no me habló en ningún momento de su actual pareja, pero quiero intuir que ese día, estaría de viaje, como la otra vez que quedamos y también fue lunes, todo, mucha casualidad.
El caso es que, finalmente y viendo como estaba ella, accedí a quedar, la hora y el lugar lo dijo ella.
Durante todo el café estuvimos en tono cordial: ella, apenada porque su ser menor no quiere acudir a ciertas citas festivas que tiene con su padre y ella es, en principio la encargada de tener que decírselo. Todo esto, yo sé que tiene un porqué, pero lo pensé después y no se lo dije: el motivo de que el ser menor no quiera acudir a ese tipo de citas es por que son "gente de fuera de su círculo de amigos" y ya no se siente "el centro del mundo": en cambio, cuando va con su madre, como conoce a todo el mundo, y se siente el centro del mundo será más feliz: antes, como estaba su padre también ese círculo, pues ella, tan contenta.
Y es que, aunque no se lo haya dicho, en parte, entiendo al padre: ella le ha apartado de su vida, por los motivos que ellos saben: él hacía e iba a todo lo que decía su mujer, casi siempre con su círculo de amigos/familia, y pocas veces con amigos de él o conocidos de él: ahora él se ha buscado nuevos amigos con quien hacer cosas y ella, "sigue con sus mismas costumbres": si todo va como creo que pueda ir y termina en un juicio y les den la custodia semanal o quincenalmente, es probable que ella "se hunda más aún": un ejemplo que me puso y la dolió: había reunión de clase y casualmente, él, sin avisar acudió, cada uno en una punta y no se dijeron nada: ella pensaba que debería haberla avisado...pero, no creo que sin algo parecido a una orden de alejamiento, haga falta ese detalle...por lo tanto venía más disgustada y vulnerable..
Y luego hablamos de nosotros, por llamarlo de alguna manera: a ella le hubiera gustado que antes la hubiera apoyado en su separación, pero ya la dije que eso era cosa suya y solo un familiar más cercano fue la que dio el pistoletazo de salida y luego, su nueva pareja, fue quien estaba en ese momento, nunca sabré desde cuando.
Ella notó que mis sentimientos hacia ella no han cambiado y se siente culpable con la famosa frase de "no se puede hacer nada", y yo, no me quiero mostrar vulnerable delante de ella, al contrario, feliz y fuerte...
Intuyo que ella ya ha hablado con su pareja y entorno de confianza y estará más tranquila, asi que, hasta la próxima semana no habrá la típica comunicación.. Hablando de comunicación, si la dije que quizás, dentro de un tiempo, ella decida no escribir, no querer quedar y lo entenderé: ella me dijo que eso sería imposible, pero, como me ha pasado más veces, también se lo dije, puede que llegue alguna vez...
Y nos despedimos sin prometer nada, yo con más regalos para ella, y ella, más sorprendida que nunca...pero eso ya para mi no es una sorpresa.
Siempre lo he dicho, ella no tiene iniciativa de nada, ella no cuenta nada si no la preguntas y por eso yo, cuando no sé nada de ella , estoy bastante tranquilo y feliz, porque sé, como ya pasó, que si la sucede algo, seré el último enterarme..y si no pregunto nada ,mejor...espero seguir así...
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