El pasado sábado, fiesta local en mi ciudad, cuando regresé de una carrera pasé por el bar en el que habitualmente desayuna el amigo cartero los sábados y si, él estaba allí, asi que, me presenté y "desayunamos juntos".
La sorpresa llegó a mitad de la conversación porque él había decidido esa mañana o media mañana no ir al pueblo, como hace otros días y solo ir por la tarde: asi que, sin pensarlo mucho, le dije que allí me presentaría por la tarde, él, simplemente dijo vale.
Pasaba la semana y de repente me llamó su hermano del cartero, que también soy amigo y me dio un dato más que curioso: "pásate un día por allí y nos tomamos algo, por el pueblo, por ejemplo, el sábado me quedé a comer alli", luego hablamos de otras cosas, de las que hablaré mañana, y se me quedó esa frase en mi cabeza y el rompecabezas se unió.
Mi amigo cartero sabía o intuía que su hermano ese día se iba a quedar a comer allí, en el pueblo, así que, él pensó que, para hacer lo que quería hacer, mejor a media tarde, sin que nadie le dijera de qué forma ni como, y así, a mi, sin esa información, parecía que era lo más normal que no fuera ese día al pueblo, como hace todos los sábados.
Pero, ese sábado, aún pasaban más cosas: el amigo militar madrileño estaba por la ciudad, acompañado, asi que, el amigo cartero decidió, casualmente, quedarse hasta más tarde y "evitar ese contacto con él", pero yo, no dije nada, solo lo intuí: también, casualmente, hace unas semanas, en algún lugar de la ciudad, tenía una cena, y si, casualmente y fui hasta el pueblo, y él, ya iba con prisa para poder llegar a la cena...entonces, pensé en las diferencias entre "querer y hacer por ver a un amigo, y lo de ir a cenar con otras amigas", en ese caso, no hubo color....
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