Estos cuatros días sin los mensajes de mi "nueva ilusión" me hace ver las cosas como años atrás, yo a lo mío, haciendo mis cosas sin dar muchas explicaciones a nadie y ella, con su familia, su verdadera familia haciendo lo que puede.
El lunes o martes me dirá lo esperado, que por fin tiene tiempo para ella y su ser menor, que su pareja " la agota" para poder seguir igual que siempre porque no la queda más remedio.
Me creo que me preguntará por estos días y, aunque haya hecho cosas, no la contaré nada, no me apetece, como hace ella, que siempre cuentas las cosas después.
Por cierto, esto de no escribir, tiene una doble vertiente: primero, ella se protege de "posibles espias" si no escribe, por mucho que me diga las cosas bonitas, luego las borra, y por otro lado, ella me protege a mí de cualquier situación "mala" que pueda tener, y si se evita las tentaciones, su vida, la vida, sigue igual.
La vida seguirá igual los próximos meses o años, ella no cambiará, a no ser que el otro cometa un fallo, y yo, seguiré haciendo mis cosas, y como ya hice con otras personas hace tiempo, no proponer para quedar, no proponer café ni proponer otras cosas, el motivo es bastante sencillo: cuando ella ha ido a comprar alguna vez alguna cosa, se podría haber pasado simplemente a saludar, como hago yo, pero, eso, en su mente, nunca estuvo, al menos, nunca me lo dijo, y, no sé porqué, tengo la sensación que, la última vez que nos vimos, ella ya venía con cierta predisposición hacia el "no", y como ahora es imposible, no sé si se arrepiente o no, pero, nunca hemos hablado del tema, ella usará la "excusa" del tiempo, yo, la de no querer...y lo sé, tampoco llegaremos a un acuerdo, y quizás, ahora, nos toque esperar mucho tiempo...más de lo deseado..
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