Como llevo diciendo desde hace más de dos meses, la situación con la que fue "mi nueva ilusión" ha dado un giro radical, que yo ya tengo asumido, que ella aún no, aunque lo tendrá que asumir, y cuando antes, por su bien mejor.
Cada vez son menos los mensajes sobre nosotros, al menos por mi parte. la cuento menos cosas, tanto de la familia, como del trabajo, y quizás de mi vida en general: y ella, tampoco cuenta mucho más, por no decir nada.
Antes, lo normal era preguntar por nuestros planes, si es que los había: yo sé que ella necesita planes el fin de semana, para que, durante la semana pueda ir preparando las cosas y disfrutar con su gente de lo que haga, ella no lo cuenta, pero el fin de semana si que pone alguna foto en su estado del móvil, para que yo lo vea y mucha más gente.
Yo en cambio, aunque haga muchas cosas, no se las digo, ni comento, a veces pongo algo y la mayor parte de las veces, absolutamente nada.
Y luego está durante la semana: la hora de finalizar son las cinco horas, a partir de ese momento, ella se mete en su guarida, en su mundo y es su rutina, y yo, suele ser a partir de esa hora cuando hago más cosas, sencillas, fáciles y me reportan felicidad.
Y luego está su estado de ánimo: por no poder hacer lo que la gustaría, esta triste, con ganas de llorar, nunca la he visto alegre, aunque, con mis mensajes, me envía sonrisas, pero, como no nos vemos, ni nos veremos...el otro día me dijo, por hora y nos tomamos un café: una quimera, tiene que dejar a su ser menor con alguien, o que se venga, para hablar de la nada, del antes, pero del futuro, nada de nada.
Espero que, como decía antes, es hora de asumir algo imposible, y que, cuanto antes lo haga, será mejor para ella y para mi también, pero eso, ya no depende de mí..
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