Han pasado ya tres días sin recibir ningún mensaje, con iniciativa, de la que fue muy nueva ilusión y sí, sabía que estoy iba a llegar y para ello estaba preparado, muy preparado.
Sabía que llegaría un día, no sabía cuando ni el momento, en que, después de un fin de semana no enviara ella ningún mensaje, que no preguntara nada, que no quisiera quedar y que, como otras tantas veces me ha pasado, esa persona, deja de escribir igual que empezó a escribir.
En este caso, creo, el punto de inflexión ha sido el fallecimiento de un familiar: entiendo que esté más triste de lo habitual, sin ganas de hablar y haciendo las cosas obligatorias y no creo que nada más, quizás, hablando o escribiendo a su familia y de paso, pues eso que empezó hace casi un año, dejar de escribir, dejar de preguntar, dejar de preocuparse y que yo haga mi vida.
Como ya conté, yo simplemente la escribí el domingo, mirando su foto en su estado del móvil, para darla el pésame y eso típico que se suele decir "si necesitas algo, ya sabes que estoy aquí", pero, a la vez sabiendo que no llamará...como así ha sido.
Mañana, jueves, tenemos curso, no sé si después del mismo, como pasó la otra vez, me llamará y me comentará cosas...o quizás no, y esta sea la semana definitiva del "adiós definitivo"...
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