Como esperaba ayer la que fue mi nueva ilusión ella me escribió a la hora indicada, más o menos, con las preguntas indicada: la primera de ellas era que una de clases estaba confinada y ella, no sabía nada, la segunda era si me había apuntado a un Congreso y la tercera si iba a comer con ellos.
Yo, en este caso, tardé en contestar bastante, hasta que terminó mi jornada laboral, cosa que ella, creo no se esperaba: a las preguntas, casi, contesté con monosílabos, pero todo muy cordial: si hubiera si otro momento creo que si le hubiera dicho o comentado, con algo así de "vete protegida", pero, en este caso, decidí omitir todo, y creo que ella se sorprendió. Lo del Congreso es lo que más me ha sorprendido: hace un par de años fuimos juntos en su coche, y con sus amigas, a otro Congreso: lo de sus amigas fue de repente, aunque, quizás, ahora con el tiempo, puedo llegar a pensar que fue preparado por ellas o por ella, pero nunca lo sabré: en aquel Congreso fuimos a comer junto con otros amigos y lo pasamos bien, asi que, su pregunta era normal, pero, sinceramente, me hubiera gustado hablar del tema como la otra vez, primero conmigo y luego con el resto y no que yo sea como el "agregado" o el "segundo plato", quizás ella, ni lo ha pensado. He estado apunto de comentarla que, a lo mejor voy acompañado, no creo que hiciera preguntas, solo el típico ok, pero, de momento me he callado.
Y ahora no espero nada, ni mensajes, ni llamadas, nada de nada, quizás en una semana, si pasa algo interesante en el trabajo, me escriba, cualquier otra cosa, sinceramente, me sorprendería.
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