Estoy seguro que en la historia de ruptura de amor de ayer casi nadie dice toda la verdad.
La penúltima noticia que he escuchado es que, a los cuarenta días de la boda, o lo que fuera qué hicieron, ya no vivían juntos y se les veía en sus hobbys juntos.
Ella sigue manteniendo que, aunque la boda fue hace poco, ellos llevan cuatro años juntos y se desgasta el amor: sigue diciendo que no hay terceras personas y que solo hay algo que la hizo ver que no sería el chico de su vida.
El, ya expareja, sigue sin decir absolutamente nada: primero, porque no es su medio, segundo, porque no le interesa ni quiere, de momento, dar ninguna explicación, la famosa es ella y ya se encarga de airear todo lo que ha pasado, y todo, lo que el famoso entorno, cuenta.
Pero ¿y si él habla? Tiene el mismo derecho, si quiere, hablar y decir su versión de los hechos, y quizás cuente eso que tanto la ha molestado, o quizás cuente que "si, ella tiene otra persona" y si es feliz con ella, y con la televisión, pues él prefiere seguir en su isla con su trabajo.
Sé que la televisión da dinero "rápido" y más publicidad, y sin esa publicidad, quizás, no puede mantener su nivel de vida, de amigos y de popularidad. Quizás ella, en esa isla, sin esa publicidad, sin esa televisión, no puede mantener ese nivel de vida, y quizás a eso, ella, no podía renunciar...
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