El otro día he vuelto a tener en mi móvil el teléfono de la amiga de Palencia. Las últimas veces que lo tuve "caí" en la tentación de escribirla, aún sabiendo más o menos lo que me iba a decir, todo normal que bien que estemos los dos bien y que "pase de mi tema"...y si, casualmente, era yo la persona que iniciaba las conversaciones, asi que, para "caer" en esa tentación de escribir y olvidarme un poco más de ella, decidí eso, quitar el teléfono, y solo, cuando estuviera más fuerte, si ella antes no me había escribo, volver a guardarlo.
El caso es que, como esta semana pasada, la persona que fue mi última ilusión decidió compartir conmigo sus últimas semanas un poco complicadas, pero ya estaba más tranquila, yo, como siempre, escribí cuando quise, con palabras algo bonitas y ella, como últimamente, me deseó buen fin de semana, sin ninguna intención de escribirme hasta más adelante, supongo, ya nada es lo que era.. pero bueno, a lo que voy, como estoy más fuerte que nunca, decidí volver a poner el teléfono de la otra, sabiendo que, ahora mismo, no tengo ninguna intención de escribir nada, si ella no escribe y creo que, de momento, no lo hará...
El caso es que, durante los últimos años que si he tenido su teléfono guardado, ella no tenía puesta ninguna foto de perfil. Casualmente, hace meses si puso una, quiero creer ahora que era con su pareja, al poco la quitó, luego entendí el motivo, después puso una foto de ella "en su lugar de trabajo" para terminar poniendo en la actualidad una foto, sonriendo, entre árboles...
Como digo, todo es casualidad, el que ahora decida hacerse visible, poner fotos contenta, decir que sus amigas la apoyan o informarme a mi de su nueva situación e incluso, hacerme creer que "tomaremos café donde ella quiera y cuando ella quiera" ya sabe mi negativa y desde entonces no ha vuelto ha decir nada más.
No sé cuanto tiempo aguantaré con su móvil, como ya dije, si quiere escribir y que me pregunte o cuente cosas perfecto, creo que sabe que yo a ella no la contaré nada...jejeje y ella, tampoco dirá nada...
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