Este 2020 hemos empezado mi nueva ilusión y yo no contándonos muchas cosas, es más, esperando a que el otro diga algo, comente algo, y es que, algo de rutina se ha instalado en nuestras vidas.
Durante el último fin de semana, como era esperable casi no hemos podido hablar, mejor dicho, ella no podía hablar, estaba su pareja al lado, y yo pasaba de escribir para no meterla en más líos, aunque, en teoría no tiene lío alguno.
Y cuando estábamos en esas, ella me envió una felicitación navideña de Reyes, es decir, me puedo imaginar que, durante casi todo el día estuvo pensando qué decirme para mantener un mínimo contacto: yo, la contesté con algo parecido, y la pregunté por su "Rey favorito": contestó "rápidamente y luego fue el silencio absoluto".
Al día siguiente vi sus típicos mensajes nocturnos, y yo ya el teléfono apagado, podría haberlo tenido encendido, pero no, lo tenía super- apagado
Al día siguiente, o sea, hoy, hasta más allá de media mañana no nos escribimos, más bien yo, y luego toda la tarde, mensajes cortos, y cordiales.
Y mañana, vuelta a la rutina: ella no sabrá donde estaré en los cumpleaños de la familia, y supongo que no preguntará, y yo tampoco preguntaré que hace ella o con quien está, es decir, cada uno a lo suyo.
Por cierto, desde hace tiempo no he propuesto quedar, ni vernos, sé que ella lo tiene muy difícil, ¿para qué presionar? Mejor, si ella puede, quiere, la apetece...pues ya iremos viendo...
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