El amigo cartero tenía la ilusión, creo, y la esperanza también, de irse con su moto a pasar el día o la tarde o un rato hasta el pueblo del amigo militar madrileño, como hemos hecho otras tantas veces, pero, este año, por su peculiar situación familiar, es todo, diferente.
El año pasado, y no sé si el anterior también, al menos yo fui en coche y pasé de ir en moto: son casi 300 km y para mi moto, me parecen demasiados, no así para el cartero, con sus normas, claro: paradas cada poco rato, que no de el sol e ir por carreras secundarias, para él, más seguras que las carreteras por las que podemos ir.
Yo sabía que la semana pasada el amigo militar madrileño había estado allí con sus seres menores, pero, yo no le dije nada: a mitad de semana él vino y más o menos se lo empezó a sugerir, el ir este sábado alli, y mi amigo, no dijo ni si ni no, hasta ayer: cuando de repente vi el mensaje preguntándole a él a qué hora iba para alli, la respuesta fue bastante sorprendente "ya estaba alli" pero el sábado a la hora de comer ya regresaba a Madrid: eso me pareció raro: se supone que su pareja iba a ir con los seres menores, ¿porqué no se queda él? Quiero creer que en el pueblo saben su situación, y quizás, él evita, de momento, estar los dos, pero a la vez separados, quizás, sea demasiado pronto, pero, todo eso él no me lo dice: entiendo que, entre semana, el trabajo e ir de vez en cuando a ver a sus seres menores, tiene suficiente y el fin de semana, él lo ocupa en diferentes tareas, pueblo, su ciudad natal...pero nada fijo. Asi que, vistas la respuesta del amigo militar madrileño, al cartero, no le convencía levantarse muy pronto, ir a tomar café con él y regresar...Quiero creer que hará otra cosa, también dudo de que pase el día en su pueblo,mucha gente para que él haga algo y, en este caso, yo no seré su segundo plato para ir algún lado, no espero llamada ni mensaje ni nada.....¿acertaré?
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