A veces tenemos las expectativas por encima de lo que realmente pasa y eso me pasa mi muchas veces, pero, suelo acertar.
Siempre espero que ciertas personas manden un mensaje, o llamen para saber cómo van las cosas, si tengo un rato libre o algo así, pero, siempre pienso "que no lo van hacer" y, casualmente sucede, tengo en mente, tres casos claros.
El primero de ellos es la exrubia que desde el mes de julio intenté quedar con ella ya me dijo que empezaba su vuelta al mundo y al parecer así ha sido por algunas fotos que ha puesto, pero, desde ese inicio de mes, no tengo más noticias.
La segunda, la amiga de Palencia, que incluso después de hacer un viaje para tomar algo con ella, bueno, aunque la avisé al llegar donde estaba, tampoco ha vuelto a escribirme nada, ni yo tampoco claro, aunque, su situación es diferente: vive con su familia, buscando hogar y con amigas, no sé mucho más de ella, jeje, que cuando ha venido a mi ciudad "tampoco tuvo tiempo de quedar", y desde ese último viaje que hice, absoluto silencio, ni he preguntado donde estará a partir de Septiembre, ni ella tampoco me ha dicho nada...es las más fácil de todas para "desaparecer".
Y por último la persona que fue mi última ilusión: tampoco tiene tiempo de escribir, ya me lo dijo, estando con gente no escribía, ¿para qué? Y yo tampoco he hecho nada. Cada día, más lejos, personalmente estoy mejor, sin saber nada, ni lo sabré ni ella quiere saber nada de mi...
Caso aparte es la exsoriana, entiendo que está de vacaciones, y cuando eso sucede, pues no quiere tener contacto: entiendo que esté con otra gente, o incluso su familia, ya me lo contará...y me vendrá "diciendo que quiere bajar de peso y lo de siempre" y si, seguirá con sus mismas cosas de siempre...
En fin, cada verano es casi igual, espero equivocarme y, en algún momento estas personas den señal de vida, de alguna manera y yo, siempre estaré cordial y educado, aunque a lo mejor más calladito y distante con quien no quiere que esté.
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