Hola amiga de Palencia, sé de sobra que esto no lo leerás nunca, se tendrían que dar muchas circunstancias para que llegaras hasta aquí por tus propios medios, sin yo decirte nada y sin que nadie te dijera nada, pero, hoy, me apetecía escribirte, no para decirte nada importante, la verdad, pero si escribirte.
Cada cierto tiempo siempre tengo la tentación de coger mi lista de móvil y empezar a borrar de dicho teléfono números de personas que no sé nada de ellos desde hace bastante tiempo, a veces lo hago y pasado el tiempo, me encuentro con sorpresas que gente, que en principio no sé quien es, me escribe y me cuenta cosas o me dice cosas, y tirando de agenda, esta ya escrita, pues sé qué son, pero a veces cuesta
Por ejemplo, el otro día hablando con un conserje de un excentro de trabajo él estaba hablando con una persona con la que mantuve mucho trato, y entre ellos se dijeron que hacía mucho que no la escribía, normal, pensé yo, he borrado su teléfono, pero ni uno ni otro, lo saben, ni lo sabrán.
Y en esas estaba cuando casi te escrito, por mail, como quedamos, pero, leyendo tus últimos mensajes en mi móvil y desde cuando no me escribes, por iniciativa propia, pensé en que tal vez, era el momento de dar el salto a la agenda y si alguna vez más vuelves a escribir, cosa que yo dudo, pues contestarte, pero, pasar de semanalmente, o a veces, a diario, a que tú hayas decidido que nada, el siguiente paso, y más evidente, es pasar a la agenda y, cuando escribas, yo contestar.
Puede que pasen horas y días, pero,tanto para tí, como para mi, lo mejor ya ha pasado, y será difícil pasar por lo que pasamos, tú querías una cosa y yo, otra, completamente diferente...el tiempo me dio la razón que no estaba equivocado y en en fondo, a tí, también.
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