Si hablo de hace treinta años y que en mi casa se veía solo la primera y la dos, me puedo imaginar que muchos, si es que alguien lee esto, se sorprendería con la cantidad de cadenas, de personajes, presentadores y programas que nos encontramos en la actualidad.
Y es que, ahora, con muchas cadenas, ahora que lo pienso ¿cuántas cadenas habrá?, e internet, hace que, puedas ver cualquier programa, serie o lo vídeo, en cuestión de minutos, si tiene muchas reproducciones, sale enseguida en el telediario.
El caso es que últimamente veo las entrevistas dentro de un programa que tiene muy poca audiencia y que suele traer a personas conocidas o no tanto: lo más normal, como él mismo presentador lo dice, es que, su equipo le suele dar tarjetas que leer para poder entrevistar, pero va ofreciendo de qué quiere hablar, a veces, la persona accede y otras veces le vacilan y no entran al trapo.
Las entrevistas suelen durar unos veinte minutos, aproximadamente y a veces, sinceramente, no se habla de nada, sino de chistes, no muy buenos del propio presentador, pero, que, como la gente que va a ver el programa, lo aplauden, guste o no, y incluso, a veces dudo que alguien conoce a la persona que va a entrevistar, pero, como hay tantas televisiones, tantos programas, uno más, bueno o malo da igual, va a tener y tendrá su público, y de momento, así es.
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