Cada día pasan más y más cosas y cuando menos curiosas.
En la tarde del jueves, fruto de una gran casualidad, estaba con el cartero dando una vuelta y me encontré de frente con el zamorano y su amiga (a la vez vecina mía) y él siempre con "malos modos" diciendo "podías haber avisado" a lo cual yo respondí, "alguien me ha avisado de que estabas por aquí?" El no dijo nada, y la vecina menos aún..que pena, la verdad. En esa misma conversación salió algo del amigo madrileño que también estaba por la ciudad y yo tampoco sabía.
Al día siguiente recibo otro sms que están tomando otro café y otro bollo en otro sitio: lo siento, chicos a mi, me da igual lo que hagais: cada vez tenemos menos cosas en común y estamos alargando algo, no bueno para nadie.
Horas después encuentro a otro amigo del madrileño que me también lo ha visto un rato, supongo que el día anterior por la tarde, y que lo ha visto más delgado y no le ha contado mucho de su viaje..cosa que tampoco me hará a mí, ni a nadie: como todos, cuenta lo que quiere..
En fin, esta "amistad" o cambian mucho las cosas o toca a su fin, o al menos a como la conociamos hasta ahora y variará bastante, de quedar quincenalmente, a ni vernos ni llamarmos.
El zamorano me ha venido decepcionando progresivamente, y en un momento malo, cuando yo pensaba que el madrileño me apoyaria, me encontré solo, y si ese apoyo, entonces fue cuando se acabó: por el zamorano me da entre pena e igual: por el madrileño solo pena, siento que si va todo igual, como hasta ahora, se encontrará él solo, casi, como le pasa a su hermano, en ese momento, veremos qué hace o si cambia de actitud, o si se vuelve, una vez más, como su hermano...
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