Ayer por la tarde noche me mandó un mensaje el amigo cartero para saber si podría meter uno de sus vehículos en otra plaza de garaje: hace tiempo dije que si, pero, alguna vez que yo lo he intentado al revés, me he llevado un buen revés, al decirme él mismo que no: pero, como mi vida, en parte ha cambiado, le dije que si, sin problemas, eso si, solo una, él pretendía meter las dos, y según el mismo, la llevaría a otro, lado, en este caso lo dudo: fue un encuentro rápido, sencillo y ya está, él se fue, supongo que algo confundido por mi respuesta afirmativa, pero, en este caso, me apetecía, eso si, solo una.
Por otro lado, el amigo exzamorano, después de no sé cuántos años está curado del todo, de su enfermedad y rápidamente, le viene a la cabeza hacer cierta cosa que él quiere hacer, eso si, él solo no sabe hacerlo y me puedo suponer que no lo hará, que es el Camino de Santiago: su propuesta, rara, es que vayamos un par de días el fin de semana para hacerlo, pero me puedo imaginar como lo quiere hacer: caminar y beber, y por la noche fiesta, pero para eso, yo prefiero no hacerlo, porque, creo que será así: se lo dije, no con esas palabras, la verdad, pero, como siempre, él se enfada, porque, claro, no le salen sus planes bien y el resto, no podemos pensar planes con otra gente o hacerlo solo, eso él ni lo entiende ni lo entenderá, tampoco pretendo que lo haga, la verdad.
Y con todo esto yo sé que, en las próximas semanas no llamará ¿para qué? si sé que hará sus planes en su lugar de trabajo viendo cosas, eso si, si yo lo llamo para ir a correr me encuentro como respuesta el silencio...sin comentarios...
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