Desde siempre y más últimamente, mi amiga exsoriana se queja de lo que gana, está con reducción de jornada, pero, yo me voy dando cuenta que tiene gastos, para mi, innecesarios y no se priva de casi nada.
Varios ejemplos: cuando hemos ido algún centro comercial siempre coge algo, aún sabiendo que tiene de todo y no la hace falta, pero, eso, da igual, es bonito, es barato, me gusta..
Por otro lado, está apuntada a una actividad musical, que no la aporta muchas cosas, en vez de por ejemplo dar un paseo para estar bien, prefiere una actividad sentada y pagando, algo que, podría hacer por su cuenta o ser autodidacta, pero, ella necesita un alguien que la diga qué hacer y cómo hacerlo
Tercero, en esta semana de vacaciones varios días se han ido a comer o cenar fuera...y aún así estoy seguro que cuando sea, me volverá a decir lo de su jornada reducida y el poco dinero.
Pero, yo, como la conozco bastante, me mantengo al margen, me quedo callado y siempre pienso lo mismo, me han enseñado a gastar menos de lo que gano, bastante menos, vivir adecuadamente, sin lujos ni ser pretencioso y sobre todo, tener algo por si acaso. Son dos formas de ver las cosas completamente diferente, si te quejas por algo, al menos, haz algo para dejar de quejarte...
No hay comentarios:
Publicar un comentario