Esta semana está siendo "bastante rara". Casi todos los días he hablado con la amiga exsoriana ya que ha tenido un problema persona con una o varias personas y está en un bucle infinito de no dejar de pensar en esa situación y no ve más allá.
Ella quiere respuestas o soluciones a su situación, incluso, según me ha contado ha acudido a profesionales para que la escuchen y sepan como poder actuar. En este caso, la he dicho que yo "solo soy su amigo, no tengo soluciones, pero te escucho".
Es curioso, ella me cuenta por lo que está pasando, sé toda la situación, me ha contado muchas veces, cómo pasó, lo que dijo y cómo actúo y su "miedo" es sobre qué pasará sin saber si pasará", y no puede parar de pensar: en cambio, mi situación con la persona que fue mi última ilusión, no sabe absolutamente nada, ni una palabra ha salido de mi boca, pero sé todas sus posibles respuestas: la primera, que cómo soy capaz de haber hecho eso, la segunda, que hubiera cortado esa situación, la tercera, que me está bien empleado lo que me ha pasado y está pasando..pero, como digo, disimulo, simplemente escucho, la digo las cosas buenas, la vuelvo a escuchar y cuando a ella la viene bien, corta la comunicación.
Que conste que empatizo con su situación, pero, como digo, sus problemas, no son mis problemas: si que pienso algo para poder ayudarla, y si veo que la puede venir, se lo digo, también otras cosas no se las digo, porque sé como es, tipo, "sal a dar una vuelta", "busca algún hobby" o similares, de esas cosas, ella no tiene, además de vez la televisión y quedar con sus amigas, para contar sus propios problemas, y no sé si escuchar al resto..
En fin, con ganas de normalidad en todos los sentidos, y con ganas de seguir haciendo mi vida, con las cosas buenas y las cosas malas y sobre todo, aprendiendo de todo lo que me está pasando y acertando con lo que podía pasar totalmente..como siempre, el tiempo, me da la razón...
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